Está considerado como un pueblo costero enclavado en una franja de mar que constituye toda una atracción por la belleza que emana de su entorno y forma parte del municipio de Granadilla de Abona, al sur de Tenerife, y que se extiende a lo largo y ancho de un área de 155 kilómetros cuadrados.
Entre sus muchos atractivos que ofrece el barrio Los Abrigos puede señalarse que por doquier pululan los restaurantes especializados en mariscos y se hallan diseminados en una zona que presenta impetuoso desarrollo urbanístico, acorde con el creciente crecimiento de un turismo atraído en lo fundamental por la tranquilidad del ambiente cotidiano y las facilidades de alojamiento y esparcimiento creadas por el hombre.
La zona del puerto donde convergen los pescadores se aprecia un sitio agradable a la vista de forasteros y locales que acuden a degustar variados platos que por su calidad en la elaboración pueden estar considerados entre los más exquisitos de todo Tenerife.
Esta zona es rica en manifestaciones culturales y ejemplo de ello es que se conmemoran numerosas fiestas populares y festivales de música. Cada 13 de junio, se celebran las fiestas en honor de San Antonio de Padua, patrón de Granadilla de Abona y constan de una nutrida romería que culmina en una gran verbena en la plaza del pueblo.
El principal regalo que le brinda Los Abrigos consiste en que casi durante todo el año el astro rey acompaña a los visitantes, quienes disfrutan de una agradable temperatura, sobre todo en las noches cuando el clima es más fresco.
Al igual que en otros barrios cercanos Los Abrigos deviene refugio para algunas especies inofensivas de la rica fauna tinerfeña, mientras su flora se presenta variada, tal como ocurre en el resto de la zona.